Cats (2019) se convierte en un filme de culto y te diré por qué

Cats es uno de los musicales más importantes desde hace 40 años, recibiendo múltiples adaptaciones a casi todos los idiomas del mundo y superando los 1000 millones de dólares desde su estreno. Por ello, no era de esperar que Hollywood decidiera adaptar al cine una de las obras de teatro más importante del mundo.

En consecuencia, al momento de estrenar su primer teaser tráiler, tanto las audiencias como la crítica ya mostraban su desaprobación por el proyecto; sobre todo por el uso excesivo e incómodo CGI en los bailarines y darle un formato completamente ajeno al material original. Lo que se tradujo en uno de los mayores fracasos de la historia de Hollywood, volviéndose prácticamente un meme.

Aunque, en los años que corren Cats (2019) se convierte en un filme de culto por ser considerada tan mala que es buena y yo te diré por qué.

El fenómeno

Producido por Andrew Lloyd Weber, basándose en los poemas de T. S. Eliot “Old Possum’s Book of Practical Cats”; Cats es el 4to musical con más tiempo en cartelera en Broadway desde 1982, siendo considerado el musical que generó el fenómeno de los “megamusicales”. Gracias al gran presupuesto y marketing invertidos, que en ese entonces no era algo usual, casi todo el planeta reconoce esos ojos de gato amarillos.

Aunado a esto, es considerado como uno de los musicales más influyentes de los últimos tiempos, siendo estrenado en 5 continentes y adaptado a múltiples idiomas; tales como alemán, checo, coreano, danés, español, finés, francés, neerlandés, húngaro, italiano, japonés, mandarín, noruego, polaco, portugués, ruso y sueco. Además de ser vista en su totalidad por más de 73 millones de personas.

Cats, a pesar de recibir una gran campaña de marketing como si fuera una película tipo Blockbuster, no es un espectáculo, sino una experiencia; ciertamente, el musical Cats es un fenómeno bastante curioso, pues su estética y dinámica narrativa tan distintiva complican que se adapte al formato del cine.

“Narra la vida de una comunidad de gatos que, una vez al año, de noche, se escapan de sus casas y se reúne en el basurero del barrio a esperar la llegada de su líder, el anciano Old Deuteronomy, quien cada año da el nombre del felino que va a pasar a una nueva vida en el Heaviside Layer, una especie de paraíso para los gatos.” (Film Affinity).

De poemas al teatro y al cine

Como mencioné antes, el origen del musical viene del libro de poemas tipo humorístico y fantasioso del británico T. S. Eliot que escribió para sus ahijados; los cuales, en resumen hablan sobre psicología y sociología felina y explican el nombre de cada gato y sus características.

Debido a la relevancia de T. S. Eliot en la poesía inglesa moderna, “El libro de los gatos habilidosos” (1939) tuvo sus primeras adaptaciones al teatro alrededor de los años 50; seguidamente, con el fenómeno de los “drunk musicals” que surgieron entre los 70´s y 80´s, Andrew Lloyd Weber propondría el musical Cats.

Dado a su éxito arrasador con varios premios Emmy, Grammy, Oliver Awards y demás, Steven Spielberg en 1994 confirmó que su estudio de animación Amblin Entretainment trabajaba en una adaptación; no obstante al cerrar la empresa en 1997, el proyecto también se perdió, aunque puedes encontrar el arte conceptual en la wiki hecha por los fanes. (Barone, J. 2019).

Después, en 1998 Andrew Lloyd Weber produjo una película directo a VHS y DVD para experimentar que el espectador sintiera que miraba la obra de teatro en directo; al final, esta versión se ha coronado como la más exitosa del musical, incluso fue transmitida por televisión en varias partes del mundo.

Pero Hollywood insistía en crear una película; por ende, los hermanos Coen, Steven Spielberg y Tom Hooper colaboraron con lo ya hecho por Weber y Spielberg para crear la película del 2019. Así, tomando en cuenta que la crítica no amó mucho Cats cuando llegó a Broadway pero al público sí le gustó, la versión “live-action” fue odiada por ambas partes; gracias a su CGI fallido y bastante feo, incoherencias de trama y falta de comprensión de la obra.

Cats (2019) como filme de culto

Muchos elementos son lo que determinan que un filme sea de culto; por ejemplo, aquellos poco conocidos, tienen una trama e ideología fuera de lo establecido o han fracasado en taquilla. Algunos ejemplos de filmes de culto son Tenshi no tamago (1985), Brazil (1985), The Rocky Horror Picture Show (1975) o El gran Lebowski (1998) o cualquier película de Ralph Bakshi.

Luego, están aquellas que fueron odiadas por la crítica y la audiencia por su dudable calidad o mala historia, siendo rotundos fracasos; pero, de algún modo, comienzan a ganar popularidad por ser consideradas tan malas que son buenas, siendo la más conocida de esta categoría The Room (2003). Así, Cats (2019) se convierte en un filme de culto al entrar en la misma categoría que la infame obra de Tommy Wiseau, pues su mal CGI, historia aburrida, pero bizarres natural la hacen encajar.

Pero ni el mejor cast puede salvar una película cuya mayor distinción es su CGI, el cual ni siquiera se terminó al estrenarse. No obstante, la animación no era el problema, sino el diseño “furry” que distrae y provoca pesadillas en más de uno, incluyéndome.

De hecho, por la cantidad de tiempo que implicó y el dinero invertido, hace de su estreno un milagro; a su vez, la incomodad visual y, curiosamente, erótica de la película hacen que Cats (2019) se convierte en un filme de culto por ser una experiencia extraña y perturbadora.

Dentro de lo rescatable, tenemos el performance de Memory de la fantástica Jennifer Hudson; también la pasión que le ponen Ian McKellen y Francesca Hayward en sus papeles y la nueva versión de Skimbleshanks de Steven McRae, él da un número de tap que debería tener más reconocimiento del que se le ha dado.

“¿Podríamos estar ante uno de los descalabros más sonoros de la década? Posiblemente. ¿Gozaremos en el futuro de este fascinante esperpento? Evidentemente.” (Mullor, M. 2019).

Cats no es un musical fácil

Primero, la dificultad del musical radica en la complicidad de la audiencia, desde imaginar a los actores como gatos hasta la interpretación del mundo. Sí, una obra de teatro puede adaptarse al cine, pero dentro de lo icónico de Cats es el vestuario, maquillaje y acrobacias; por lo que, al sustituirlo todo por CGI para hacerlos “más reales” y exagerar los bailes, provoca que la audiencia lo sienta todo antinatural.

Es más, la belleza de Cats está en sus bailes, canciones y el viaje surrealista por el mundo gatuno, eso sí, sin mucha trama; razón por la cual muchos se echaron para tras cuando se proponía hacer una película del musical. Y con la llegada del tráiler de la versión de Tom Hooper, los fanes de la obra y no tan fanes ya se veían venir una película bizarra y extraña como poco.

“Los actores interactúan con el público, pasean por el patio de butacas cual suburbio londinense, logrando convertir el teatro al completo en ese callejón obscuro. (…) Con la ayuda del público, se logra una complicidad y una atmósfera que no se puede dar en el cine.” (L. E. Lucas, 2020).

Por esta razón, es que no se puede comparar Cats con musicales como Mamma Mia, El Fantasma de la Ópera o The Heaters, pues el formato y exigencia de Cats le cuesta encajar con la fórmula de Hollywood; aunque eso no le quita que, durante la producción, se tomaron todas las decisiones equivocadas como la contratación de star talents y ese horrible CGI.

Pero son estos mismos desastres lo que provoca que Cats (2019) se convierte en un filme de culto. Mientras Cats (1998) es recordada por su buena música, color y diseño, Cats (2019) será recordada por hacer reír por el horror e impresión que provoca.

Un viaje de hierba de gato

Por algo esta película merece ser considerada de culto junto a su predecesora del 98, pues te puedes divertir muchísimo más con un fracaso fenomenal como The Room que un éxito taquillero como Qué pasó ayer III; por algo películas como Cool World, que son apasionadamente catastróficas son más recordadas y amadas por el público que cualquier producción que esté en el top 10 de Netflix.

“Hay ocasiones en las que debemos salir de nuestra zona de confort; lo que implica reflexionar por qué algo se arriesga y por qué algo no, desacreditar un experimento fallido es tan imperdonable como ignorar un experimento exitoso. Es innegable decir que no existe nada como el bizarro estilo y guion insensato de la película, por lo tanto es una experiencia inolvidable.” (Nostalgia Critic, 2021).

Si te interesa, puedes conseguir el libro traducido al español en la casa editorial PRE-TEXTOS y si deseas saber más del musical, consulta la página web oficial.

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Referencias bibliográficas

• ABC Play. (2020, Abril 13). Cats no es solo la peor película del año, el rodaje también fue un “infierno”: “Nada tenía sentido.” Abc.
• Barone, J. (2019, Diciembre 18). “Cats”: What to Know Before You See It. The New York Times.
• González, P. (2020, Febrero 3). “Cats” está destinada a ser una película de culto. Theamaranta.com.
• La Zona Cero. (2019, Diciembre 29). Cats: La PEOR Película del Año | Crítica | LA ZONA CERO. YouTube.
• Lucas, L. E. (2020, Enero 9). Cats no es Mamma Mia! – A La Contra.
• Mullor, M. (2019, Diciembre 22). Ya hemos visto “Cats” y es un esperpento fascinante. Fotogramas.
• Nostalgia Critic. (2021, Agosto 4). Cats – Nostalgia Critic. YouTube.
• Rotten Tomatoes. (2021, Junio 10). “Rotten Tomatoes Is Wrong” About… Cats. Editorial. rottentomatoes.com.
• Yester HsH. (2020, Septiembre 20). CATS (1998) vs. CATS (2019) | Review y Comparación | Por Yester. YouTube.